Tontín y la delincuencia

Tontín quedó nuevamente solo. Disfrutó orgullosamente de cuatro colaboraciones valiosas que aportaron otros aspectos y nuevas interpretaciones a este problema que les hace a las personas decentes dudar que lo suyo siga siendo suyo.
La existencia del hombre en el planeta tierra ha tenido problemas desde los comienzos. Nos imaginamos que primero fue la falta de conocimientos tal como el manejo del fuego, la búsqueda de refugios donde habitar, procurarse alimentación, defenderse de los animales feroces. Todo fue solucionándose. Más tarde fue desvastado por epidemias como el cólera y la viruela. Las controló. A través de los siglos ha sufrido terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, tormentas, vendavales, huracanes y más. Para todo ha encontrado paliativos y controles de bastante eficacia. Merece ser destacado que nada ha sido tan universal como la delincuencia. Todo lo nombrado siempre ha afectado regiones y tampoco nada ha tenido un origen pensado y realizado intencionalmente como las acciones delictuales. Los males citados, productos de la naturaleza, aparecieron sin intervención del hombre. La delincuencia es universal y causada por hombres que dañan y matan fríamente justificándose con sinrazones inaceptables Tratándose de delincuencia el hombre está contra el hombre. Una penosa división que no deja escapatoria.
Tontín vuelve a ofrecer la palabra.