martes, diciembre 07, 2004

El código de amor de las flores, Capitulo Final

  • La dalia esta asociada con la perfidia y el peligro. La historia cuenta que la emperatriz josefina estaba enamorada de las dalias y cultivo muchas variedades. Una doncella le pidió a su amante, el jardinero, que robara algunas raíces de las flores para que ella pudiera cultivarlas. Josefina, que oyó el pedido, mando a encarcelar y azotar a los dos enamorados y luego destruyo más de cien especies prendiendo fuego al invernadero.
  • Enviar un ramillete de anémonas significa que le deseamos al destinatario un futuro breve e infeliz. Según la mitología, la anémona o hija del viento, era la ninfa amada por céfiro. Esto suscito la ira de flora, quien la convirtió en una flor que florece inmediatamente antes de la primavera del norte. Por lo tanto es una flor que brota demasiado temprano, es destrozada y muere.
  • Las margaritas se dejaban sobre las tumbas de los caídos en Francia para simbolizar el recuerdo y el deseo de que las cosas hubiesen podido ser mejores.
  • Las vincapervincas eran las flores de la muerte y el dolor, y se usaban como coronas de burla para dar a los condenados a muerte en su camino hacia el patíbulo. Sin embargo, algunos sostienen que si un marido y su mujer las comen juntos, logran que el amor permanezca entre ellos para siempre. Llamada en algunas regiones de Europa violeta de los brujos, se decía que pulverizada con lombrices de tierra y servida con carne producía chispas en dos personas de distinto sexo.

    El sauce esta relacionado con los enamorados que han sido abandonados. Se decía que si una persona había sido plantada debía llevar en su pecho hojas de sauce como signo de aflicción y sufrimiento. En Gales existía la costumbre de enviar una guirnalda de sauce a una muchacha o un joven abandonados en la víspera de su casamiento.
  • La violeta es el símbolo de la constancia y la fidelidad. Se dice que napoleón era un enamorado de estas flores. Cuando se caso con josefina, ella llevaba violetas en su vestido y en cada aniversario, el le enviaba un ramo. Cuando fue derrotado y tuvo que marcharse al exilio en Santa Elena, pidió visitar su tumba: allí recogió violetas y cuando murió se las encontraron en un relicario alrededor del cuello.
  • Símbolo eterno del poder creativo femenino, la rosa figuraba al servicio de la bruja, que destilaba sus pétalos en unas pócimas para atraer a un galán indeciso. Un antiguo hechizo alemán dice: tome tres rosas, una blanca, una rosa y una roja. Llévelas cerca de su corazón tres días. Modelas en vino tres días más y luego déle el vino a su amante. Cuando lo beba, será eternamente suyo.
  • Si dos hombres se aman pueden regalarse la flor del jacinto. Jacinto era un joven muy bello, a quien el dios Apolo amaba profundamente. Un día, mientras estaban jugando a los tejos, Apolo lanzo un tejo y sin querer mato a jacinto. Al comprender que no volvería a ver nunca más a su querido, con el corazón destrozado, lo transformo en una hermosa flor.