Taller de las Chochas
“No todos los adultos mayores han tenido la suerte que tenemos nosotras, que nos ayuden, que nos tomen en cuenta y nos valoren”
Palabras de Cardelina de los Ángeles entregadas, escritas, a ¿Chocherías? quien con emoción participa de ellas a la Caja de Compensación “Los Héroes” y a la “Corporación Adulto Mayor Provincia de Cachapoal” que se las han ganado con su accionar en pro de la literatura del pueblo mayor.
También han contribuido a que Cardelina formule su emotivo reconocimiento funcionarios municipales, algunos de jerarquía y otros que desde su desempeño más modesto pusieron lo suyo con oportunidad y entusiasmo.
El Taller que reúne a estas Chochas funcionó el lunes 14 comenzando con la siguiente parábola:
Un fabricante, artesanal, de lápices se dirige a uno de ellos, antes de meterlo en una caja, con las siguientes palabras:
· “Harás cosas grandiosas si te dejas sostener en la mano de alguien”
· “Te dolerá cuando te saquen punta pero escribirás mejor”
· “Cometerás errores, habrá una goma”
· “La parte más importante de ti la llevas dentro”
· “Donde te usen dejarás tu marca”
Las Chochas iniciaron comentarios de la parábola con visible timidez pero muy pronto establecieron veloces rondas de opiniones y se obtuvieron las siguientes conclusiones:
Lápiz en mano tienden a fundirse, el lápiz son ellas y ellas son el lápiz. Se sienten sostenidas por quienes hacen posible que sus trabajos, en letra de imprenta, vayan a los demás adultos mayores. Y también tienen como amigos que las sostienen al diccionario de la lengua, el de sinónimos y la gramática.
Al leer el trabajo de alguna otras descubrieron un error que corrigieron casi a coro completo y luego comentaron festivamente:”Le sacamos punta, le sacamos punta, escribirá mejor”
Están dispuestas a gastar cuanta goma sea necesaria, corregirán una y veinte veces.
El grafito interior del lápiz y la mente y corazón en el interior de ellas son lo más importante
Esperan que sus marcas, modestas, a nivel de aficionadas, algunas con la escolaridad que ofrecía el pequeño pueblo donde nacieron y crecieron y que era, en los años 1930 a 1950 cuarta preparatoria, esas marcas, decimos, consignen recuerdos, vivencias, sueños y productos de la imaginación para añadir a la vida un poquitín distinto.
Palabras de Cardelina de los Ángeles entregadas, escritas, a ¿Chocherías? quien con emoción participa de ellas a la Caja de Compensación “Los Héroes” y a la “Corporación Adulto Mayor Provincia de Cachapoal” que se las han ganado con su accionar en pro de la literatura del pueblo mayor.
También han contribuido a que Cardelina formule su emotivo reconocimiento funcionarios municipales, algunos de jerarquía y otros que desde su desempeño más modesto pusieron lo suyo con oportunidad y entusiasmo.
El Taller que reúne a estas Chochas funcionó el lunes 14 comenzando con la siguiente parábola:
Un fabricante, artesanal, de lápices se dirige a uno de ellos, antes de meterlo en una caja, con las siguientes palabras:
· “Harás cosas grandiosas si te dejas sostener en la mano de alguien”
· “Te dolerá cuando te saquen punta pero escribirás mejor”
· “Cometerás errores, habrá una goma”
· “La parte más importante de ti la llevas dentro”
· “Donde te usen dejarás tu marca”
Las Chochas iniciaron comentarios de la parábola con visible timidez pero muy pronto establecieron veloces rondas de opiniones y se obtuvieron las siguientes conclusiones:
Lápiz en mano tienden a fundirse, el lápiz son ellas y ellas son el lápiz. Se sienten sostenidas por quienes hacen posible que sus trabajos, en letra de imprenta, vayan a los demás adultos mayores. Y también tienen como amigos que las sostienen al diccionario de la lengua, el de sinónimos y la gramática.
Al leer el trabajo de alguna otras descubrieron un error que corrigieron casi a coro completo y luego comentaron festivamente:”Le sacamos punta, le sacamos punta, escribirá mejor”
Están dispuestas a gastar cuanta goma sea necesaria, corregirán una y veinte veces.
El grafito interior del lápiz y la mente y corazón en el interior de ellas son lo más importante
Esperan que sus marcas, modestas, a nivel de aficionadas, algunas con la escolaridad que ofrecía el pequeño pueblo donde nacieron y crecieron y que era, en los años 1930 a 1950 cuarta preparatoria, esas marcas, decimos, consignen recuerdos, vivencias, sueños y productos de la imaginación para añadir a la vida un poquitín distinto.
<< Home