Vivir la Vida
Chocherías octubre en su página 5 da a conocer la realización de este encuentro regional. La profesora de gimnasia en más de una oportunidad se refirió al tema promocionándolo con entusiasmo y hasta se mencionó la posibilidad que Los Años Dorados mostrara su “Clase de Chachachá” A veces somos inexplicablemente apáticos, poco participativos, obteniendo un menos cuando nos correspondía tener un más.
Vimos delegaciones de Graneros, Totihue, Chimbarongo, Nancagua, Requínoa, Navidad, Rengo, Las Cabras, Peumo, San Vicente, San Francisco de Mostazal, Codegua, Machalí, Coltauco, Doñihue, Litueche, Paredones, Lolol, Pichichilemu y otras cuyos nombres no retuvimos.
Un participante de un pueblo vecino confidencia: Pusieron un solo bus y debió entregarse un cupo de sólo seis participantes por club. Un dirigente de la Ucam de esa comuna corrige, los buses fueron tres, dos se completaron con un conjunto folclórico, con un grupo de gimnasia y clubes de Lo Cartagena, Rosario y Cerrillos.
Un bus tiene una leyenda: Chimbarongo Bus Nº 7 y pregunto a una voluntaria asistente si realmente vienen 7 buses de Chimbarongo y me informa que vienen 8, ella recibió orden de atender al número 4. Explico lo de “Voluntaria Asistente” Jovencitos y jovencitas en cantidad apreciable, uniformados con un peto rojo, asignados a cada delegación, medida muy acertada ya que el Patricio Mekis estaba dividido en 10 sectores donde se irían realizando distintas actividades de las que citamos algunas que acuden al recuerdo: Vivir saludablemente, Viviendo la Música. Viviendo las Marionetas, Viviendo el Baile y varios Viviendo.. más. En “Vivir Saludablemente” el Ministerio Regional de Salud y la municipalidad de Rancagua tenían locales donde se distribuía vasitos de bebida láctea, queques y galletas artesanales con notoria disminución de componentes grasos. Además se obsequiaba una elegante bolsita con leyendas alusivas al consumo de frutas, verduras y legumbres, la bolsita portaba dos manzanas. Vecino estaba otro local advirtiendo los males provenientes del uso del tabaco.
En el “Encuentro” estaban presentes la Cruz Roja, Defensa Civil, Un carro de Bomberos, Una delegación del Ejército de Chile del que tuvimos oportunidad de ver descender un paracaidista o ¿Deberé decir parapentista?. También presenciamos una carrera apresurada portando una camilla. Dos jóvenes de la Defensa Civil me dieron una acabada información frente a un plano general, esto fue de gran utilidad en mi recorrido.
Un punto bajo. Entendemos que obras de humanos están sujetas a errores. También entendemos que destacarlas lleva a correcciones. ¡Dios me conceda vida para estar presente en el “Encuentro” del próximo año! Y este bajo sea un alto.
En “Lo Años Dorados” y comprobamos que también en otros clubes, se recibió información que habría una zona de comidas con un restaurante atendiendo almuerzos por valor de un mil pesos. Antes de consignar lo presente conversamos con algunos dirigentes Ucam y las conclusiones fueron:
Improvisación en lugar de planificación.
La tarifa de un mil pesos no se respetó en todos los clientes,
Faltó observancia a reglas de higiene y
Hubo notoria y desagradable falta de personal.
Agregaron, todos los dirigentes consultados que, de ningún modo, este tropiezo disminuyó o empañó el éxito de “Vivir la Vida” que proporcionó a miles de adultos mayores la oportunidad de una alegre, necesaria y movida convivencia.
Chocherías considera oportuno agregar algunas consideraciones con vistas al futuro. En el asunto almuerzo las señoras se separan en dos grandes grupos cuyas razones son igualmente válidas y absolutamente contrapuestas. Hay señoras que afirman “Yo siempre prefiero llevar cocaví para mi y los míos, así se lo que comemos y como se preparó” Dichos lógicos, sensatos, dignos de respeto y consideración. Otras señoras declaran: “Me paso en la cocina todo el año, si tengo una oportunidad de sentarme a que me atiendan, bienvenida sea y que felicidad pararme con un destino distinto a ir a lavar loza. Tal como las anteriores declaraciones, lógicas sensatas, dignas de respeto y consideración.
Las partidarias de la primera ponencia encontraron mesas y sillas de muy buen ver bajo los árboles esperándolas a ellas y a su cocaví. También había cómodos y adecuados receptáculos para los desperdicios y dos auxiliares de la empresa de aseo de Rancagua con sus carros recorrían todos los sectores. Los Adultos Mayores no usaron los suelos de veredas, pasillos, prados, patios o canchas como basureros. Una limpieza bellamente hermosa. ¡Que bien!
Las partidarias de vacación, recreo y asueto a la hora de almuerzo tuvieron menos fortuna pero la mayoría no hizo gran cuestión, escuchamos un: “No se te de “na” niña, más se perdió en la guerra”` También hubo reclamos airados que contaron con mucho apoyo.
Una precisión necesaria. Para los adultos mayores un almuerzo, el más básico y económico consta de entrada, plato de fondo y un jugo o un postre, servido a la mesa que como mínimo tenga un salero, una panera con un trocito de pan y unas servilletas. En algunas ocasiones hemos escuchado ironizar “Mucho mantel y poco chocolate” Para las señoras deseosas de sentirse atendidas aunque sea una vez al año el “mantel” incluye personal que le lleve y retire el plato, le pregunte si le lleva otro vasito de jugo con cara que trasmita sentimientos amistosos. ¿No hay presupuesto que aguante? ¿Y los voluntarios de apoyo? Jovencitos y jovencitas inteligentes, motivados y que podrán proclamar “Yo serví, fui útil al adulto mayor”
El sistema de bandejas para retirar de un mesón, aunque lleve exquisitos manjares tiene categoría de colación. Buena para estudiantes, buena para trabajadores. No es el almuerzo con mantel, no importa que el chocolate sea sólo regular y la cantidad no generosa. Total, en el Consultorio el médico y la nutricionista la están previniendo a menudo que sea medida en el comer.
Volviendo al aspecto recreacional la rancagüina Carolina Soto y el cantante Daniel Donoso, estrellas de la televisión chilena y la orquesta de Tommy Rey se llevaron enfervorizados aplausos y la declaración repetida una y cien veces: “Nunca soñé con verlos en vivo”
Otra declaración: “Bailé, canté, grité y reí como nunca en mi vida”
Una participante, María Inés, de La Viña y otra cuyo nombre no escuchamos bien fueron declaradas merecedoras de premios especiales.
Algo así como campeonas del entusiasmo y participación.
Señores del Senama: Gran tarea para el próximo año.
Vimos delegaciones de Graneros, Totihue, Chimbarongo, Nancagua, Requínoa, Navidad, Rengo, Las Cabras, Peumo, San Vicente, San Francisco de Mostazal, Codegua, Machalí, Coltauco, Doñihue, Litueche, Paredones, Lolol, Pichichilemu y otras cuyos nombres no retuvimos.
Un participante de un pueblo vecino confidencia: Pusieron un solo bus y debió entregarse un cupo de sólo seis participantes por club. Un dirigente de la Ucam de esa comuna corrige, los buses fueron tres, dos se completaron con un conjunto folclórico, con un grupo de gimnasia y clubes de Lo Cartagena, Rosario y Cerrillos.
Un bus tiene una leyenda: Chimbarongo Bus Nº 7 y pregunto a una voluntaria asistente si realmente vienen 7 buses de Chimbarongo y me informa que vienen 8, ella recibió orden de atender al número 4. Explico lo de “Voluntaria Asistente” Jovencitos y jovencitas en cantidad apreciable, uniformados con un peto rojo, asignados a cada delegación, medida muy acertada ya que el Patricio Mekis estaba dividido en 10 sectores donde se irían realizando distintas actividades de las que citamos algunas que acuden al recuerdo: Vivir saludablemente, Viviendo la Música. Viviendo las Marionetas, Viviendo el Baile y varios Viviendo.. más. En “Vivir Saludablemente” el Ministerio Regional de Salud y la municipalidad de Rancagua tenían locales donde se distribuía vasitos de bebida láctea, queques y galletas artesanales con notoria disminución de componentes grasos. Además se obsequiaba una elegante bolsita con leyendas alusivas al consumo de frutas, verduras y legumbres, la bolsita portaba dos manzanas. Vecino estaba otro local advirtiendo los males provenientes del uso del tabaco.
En el “Encuentro” estaban presentes la Cruz Roja, Defensa Civil, Un carro de Bomberos, Una delegación del Ejército de Chile del que tuvimos oportunidad de ver descender un paracaidista o ¿Deberé decir parapentista?. También presenciamos una carrera apresurada portando una camilla. Dos jóvenes de la Defensa Civil me dieron una acabada información frente a un plano general, esto fue de gran utilidad en mi recorrido.
Un punto bajo. Entendemos que obras de humanos están sujetas a errores. También entendemos que destacarlas lleva a correcciones. ¡Dios me conceda vida para estar presente en el “Encuentro” del próximo año! Y este bajo sea un alto.
En “Lo Años Dorados” y comprobamos que también en otros clubes, se recibió información que habría una zona de comidas con un restaurante atendiendo almuerzos por valor de un mil pesos. Antes de consignar lo presente conversamos con algunos dirigentes Ucam y las conclusiones fueron:
Improvisación en lugar de planificación.
La tarifa de un mil pesos no se respetó en todos los clientes,
Faltó observancia a reglas de higiene y
Hubo notoria y desagradable falta de personal.
Agregaron, todos los dirigentes consultados que, de ningún modo, este tropiezo disminuyó o empañó el éxito de “Vivir la Vida” que proporcionó a miles de adultos mayores la oportunidad de una alegre, necesaria y movida convivencia.
Chocherías considera oportuno agregar algunas consideraciones con vistas al futuro. En el asunto almuerzo las señoras se separan en dos grandes grupos cuyas razones son igualmente válidas y absolutamente contrapuestas. Hay señoras que afirman “Yo siempre prefiero llevar cocaví para mi y los míos, así se lo que comemos y como se preparó” Dichos lógicos, sensatos, dignos de respeto y consideración. Otras señoras declaran: “Me paso en la cocina todo el año, si tengo una oportunidad de sentarme a que me atiendan, bienvenida sea y que felicidad pararme con un destino distinto a ir a lavar loza. Tal como las anteriores declaraciones, lógicas sensatas, dignas de respeto y consideración.
Las partidarias de la primera ponencia encontraron mesas y sillas de muy buen ver bajo los árboles esperándolas a ellas y a su cocaví. También había cómodos y adecuados receptáculos para los desperdicios y dos auxiliares de la empresa de aseo de Rancagua con sus carros recorrían todos los sectores. Los Adultos Mayores no usaron los suelos de veredas, pasillos, prados, patios o canchas como basureros. Una limpieza bellamente hermosa. ¡Que bien!
Las partidarias de vacación, recreo y asueto a la hora de almuerzo tuvieron menos fortuna pero la mayoría no hizo gran cuestión, escuchamos un: “No se te de “na” niña, más se perdió en la guerra”` También hubo reclamos airados que contaron con mucho apoyo.
Una precisión necesaria. Para los adultos mayores un almuerzo, el más básico y económico consta de entrada, plato de fondo y un jugo o un postre, servido a la mesa que como mínimo tenga un salero, una panera con un trocito de pan y unas servilletas. En algunas ocasiones hemos escuchado ironizar “Mucho mantel y poco chocolate” Para las señoras deseosas de sentirse atendidas aunque sea una vez al año el “mantel” incluye personal que le lleve y retire el plato, le pregunte si le lleva otro vasito de jugo con cara que trasmita sentimientos amistosos. ¿No hay presupuesto que aguante? ¿Y los voluntarios de apoyo? Jovencitos y jovencitas inteligentes, motivados y que podrán proclamar “Yo serví, fui útil al adulto mayor”
El sistema de bandejas para retirar de un mesón, aunque lleve exquisitos manjares tiene categoría de colación. Buena para estudiantes, buena para trabajadores. No es el almuerzo con mantel, no importa que el chocolate sea sólo regular y la cantidad no generosa. Total, en el Consultorio el médico y la nutricionista la están previniendo a menudo que sea medida en el comer.
Volviendo al aspecto recreacional la rancagüina Carolina Soto y el cantante Daniel Donoso, estrellas de la televisión chilena y la orquesta de Tommy Rey se llevaron enfervorizados aplausos y la declaración repetida una y cien veces: “Nunca soñé con verlos en vivo”
Otra declaración: “Bailé, canté, grité y reí como nunca en mi vida”
Una participante, María Inés, de La Viña y otra cuyo nombre no escuchamos bien fueron declaradas merecedoras de premios especiales.
Algo así como campeonas del entusiasmo y participación.
Señores del Senama: Gran tarea para el próximo año.
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